El Hospital Virgen del Rocío ha reactivado la investigación abierta por el uso de un medicamento para prevenir las náuseas y vómitos derivados de la quimioterapia que se probó como antitumoral.
El Hospital Virgen del Rocío ha reactivado la investigación abierta por el uso de un medicamento para prevenir las náuseas y vómitos derivados de la quimioterapia que se probó como antitumoral. Fuentes del centro señalaron que el hospital ha abierto una información reservada para recopilar toda la información sobre los seis casos detectados de uso compasivo (medicamentos que se prescriben para una finalidad no autorizada oficialmente) y saber qué médicos los impulsaron y por qué. La investigación corre a cargo del gabinete jurídico, que está trabajando en coordinación con la Gerencia y la Dirección Médica del hospital.
"No se parte de la desconfianza, pero es un tema que se quiere aclarar porque ha generado percepción de inequidades, de utilización no del todo rigurosa del uso compasivo, una queja del Defensor del Pueblo", explicó un portavoz del hospital. La intención, explican estas fuentes, es "aclarar" todo lo ocurrido y depurar responsabilidades "si las hay". "Luego se verá si hay que adoptar medidas disciplinarias", señalaron las fuentes.
Esta investigación es la continuación de la abierta por el Virgen del Rocío antes del verano de 2009, cuando se detectaron varios casos de uso compasivo de Emend, un medicamento cuyo principio activo es el aprepitant. Un equipo de investigadores sevillanos estudia desde hace años unas supuestas propiedades anticancerosas de este medicamento usado en grandes dosis, aunque aún no se ha puesto en marcha un ensayo clínico que pruebe o descarte estos efectos. Con todo, médicos del Virgen del Rocío han prescrito en altas dosis el medicamento como último intento de frenar el cáncer en al menos seis ocasiones. Salud ha admitido que algunos de los beneficiarios son familiares o conocidos de trabajadores del centro.
Un comunicado emitido la semana pasada por el hospital señalaba que "tras una investigación interna" el centro decidió no autorizar nuevas solicitudes de uso compasivo de Emend y revocar las que existían. Ahora, según fuentes del hospital, se ha reactivado la investigación, que está en fase de instrucción. Según estas fuentes, ya se ha empezado a "sentar" a "todos los implicados" para escuchar sus explicaciones.
La decisión se ha tomado tras conocer una resolución dictada hace dos semanas por el Defensor del Pueblo Andaluz en la que se denuncia la falta de equidad en el uso compasivo del aprepitant. El dictamen de Chamizo responde a la queja presentada por la madre de un enfermo de cáncer al que se le negó la prescripción del fármaco. El hospital negó la semana pasada la "inequidad" en el acceso al medicamento, pero admitió que la prescripción se hizo sin cumplir "los mínimos requisitos de seguridad exigibles al uso compasivo" y sin conocer "la toxicidad y los efectos secundarios" de las altas dosis empleadas en estos casos.
Según la madre que denunció la situación, su hijo, que falleció el pasado 2 de febrero, ingería 24 pastillas al día en lugar de la dosis única diaria que se toma para prevenir las náuseas. El coste de este tratamiento supera los 600 euros diarios.
jueves, 8 de abril de 2010
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